El tiempo es oro. Y no tengo dudas, porque tú más
que nadie sabes cuánto han brillado para mí estos casi 108,864,000 segundos que
he estado a tu lado.
Este tiempo de disfrutar de un amor sin condiciones, sin
quebrantos, sin dolores, sin dudas y mucho menos, competencias absurdas.
Este tiempo en que nos hemos dado cuenta que más
vale lo que se tiene, que lo que se quiere tener y no se puede.
Créeme que me faltan palabras para describir estas 30,240 horas de alegría compartiendo tu sonrisa, inyectándome de tu
juventud, de tu nobleza y de tus ganas de amar. Compartiendo tus ojos, tus manos, tus caricias, tus virtudes, tus defectos, tu café, tus obsesiones, tus buen gusto, tus pasiones. Compartiendo lo bueno y lo malo. Porque no somos perfectos, y en una relación se comparte todo.
A tu lado, estos 1,260 días me han enseñado que el amor existe a pesar de
las limitaciones, a pesar de lo externo, que se empeña en frenar sin éxito lo
que estamos construyendo, a pesar de los incrédulos que se aferran en creer que
el amor sincero y maduro es solo un sentimiento que existe en las telenovelas. A pesar de la envidias, de los tropezones, de lo difícil que es una vida real y no la fantasía.
Sin ti, estos 42 meses hubieran sido el ocaso de
mis días. Y no porque quiera maximizarte, ni endiosarte, ni mucho menos hacértelo creer. Simplemente sin ti, el tiempo no fuera lo mismo...
Contigo el tiempo
fluye en todos los sentidos.
No borra con olvidos
porque no hay nada que borrar.
(Más que los
defectos tolerables
que
forman parte de nosotros
y
hasta los intolerables que no se pueden quitar).
Contigo el tiempo
hace infinitos los sucesos.
Es como si viajáramos a velocidades
cercanas a la velocidad de la luz.
Contigo el tiempo
no hace relaciones perfectas,
pero sí convivibles y duraderas.
Contigo el tiempo
no admite conceptos relativos
porque el tenerte
hace que el tiempo
haga absoluto a lo vivido
y a lo que nos falta por vivir.
Maldigo el tiempo que no estuve a tu lado,
viviendo como un naufrago en el tiempo,
aunque le agradezco el haberme preparado
para amarte mejor.
hermoso poema!!! que más podría pedir tu musa inspiradora?
ResponderEliminarEl tiempo así vivido, jamás sera perdido.
ResponderEliminarUn abrazo.